martes, 21 de enero de 2014

Revoltillo de carne multicolor

¡Buenos días "almidoneros"!

Últimamente escucho muchos casos de mascotas cuyo equilibrio emocional ha entrado en crisis. ¡Seguro que ustedes también conocen algún caso cercano!...¿a que sí?

En esta ocasión se trataba de un pastor alemán siberiano que tenía que acudir regularmente a una "etóloga" (la psiquiatra de los animales, ¡para que nos entendamos!) junto con su dueña (mi amiga) para que superase su: ANSIEDAD DE SEPARACIÓN. 

Cada vez que mi amiga se iba a trabajar, allá que iba "Lucky" (la identidad ha sido modificada para preservar la identidad del paciente), y se ponía en modo "verás la que armo". Aparte de esparcir el contenido del cubo de la basura por todas las habitaciones de la casa, se pasaba las horas abriendo cajones y esparciendo la ropa por el suelo. ¡Adorable!, ¿verdad?

...¿Que cuál fue el tratamiento que le prescribió la "etóloga"? Pues DOS fueron las opciones que propuso

1) drogar al perro (¡¡menuda matasanos!!), o bien
2) Poner en práctica un tratamiento de "TE IGNORO PERO VUELVO ENSEGUIDA", que consistía en no hacerle ni caso al chucho, al llegar y al irse de casa. Dicho "tratamiento" debía durar un mes y exigía que hubiese alguien permanentemente con "Lucky" en la casa.


...Y yo me pregunto: ¿hace falta contratar a una canguro que haga compañía a "Lucky" mientras mi amiga y su chico trabajan, para que no se quede solo? ¿O basta con contratar a una limpiadora que de paso "ignore al chucho a su llegada y a su partida" para seguir con "el tratamiento"?

...¿CÓMO LO VA A SOLUCIONAR MI AMIGA? Pues verán: dado que está embarazada, esperará a su baja maternal para poner en práctica el tratamiento de "Lucky".
 ...¿Cómo lo ven?...¡¡Pan comido, eh!! Yo no quiero ni imaginarme la escena, máxime cuando la basura comenzará a llenarse de PAÑALES... 

Hoy ilustro este breve relato con la imagen de un lindo gatito que tuve hace años, cuando aun vivía con mis padres. Se llamaba "Ginger", y tenía por costumbre correr a toda velocidad, y tirarse sobre las alfombras para aprovechar el deslizamiento sobre el parquet...¡UN AUTÉNTICO GATO SURFERO!  ¡¡Daba gusto ver cómo un pequeño felino como él, sabía disfrutar de los pequeños placeres de la vida! Bravo Ginger, si me estás viendo desde el cielo: ¡¡va por ti!!


Hoy les traigo un plato EGOÍSTA: toíto pa mí.
Esta receta surgió en uno de esos días en los que la nevera HACÍA ECO (como diría mi querida amiga Yolanda, ¡¡je, je!!), y había que improvisar algo rápido. 

Es una receta: sin gluten, sin lácteos y baja en almidón.


REVOLTILLO DE CARNE MULTICOLOR (1 ración)

438 calorías por ración

 

Ingredientes:

  • 100 g de carne de ternera molida (2 veces)
  • 1/2 pimiento rojo
  • 1 plátano de Canarias maduro
  • un trocito de calabacín
  • 1/2 cebolla pequeña
  • aceite de oliva
  • sal
  • pimienta negra molida
  • cebollino fresco para decorar
1. Lavar el pimiento y cortarlo en dados pequeños. Lavar el calabacín y cortarlo en dados pequeños. Pelar la cebolla y cortarla menuda.

2. Pelar el plátano y cortarlo en dados.

3. Echar en una sartén un chorrito de aceite de oliva y cuando esté caliente, freír el pimiento, la cebolla y el calabacín. Cuando estén tiernos, incorporar la carne y cuando ésta esté dorada, añadir los dados de plátano.

4. Salpimentar al gusto y emplatar. Decorar el plato con unas ramitas de cebollino fresco.

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