jueves, 15 de septiembre de 2016

Mousse de chocolate saludable


¡Bonjour mis queridos parisinos!  

Este mes de Agosto visité a unos amigos en la capital francesa. Todos los que hayan visitado tan bella ciudad, recordarán: la música del acordeón junto al río Sena, las cafeterías; cuyas sillas desplegadas en las aceras, convierten a los transeúntes en improvisados actores...

Pero les diré qué fue lo que captó mi atención en las cercanías de la catedral de Notre-Dame. Un niño de unos 7 años tocaba una pegadiza melodía en su acordeón mientras hipnotizaba a los viandantes con su magnética sonrisa...hasta ahí, todo normal. 

A unos metros del carismático joven, nos encontramos con otro muchacho de unos 10 años y de aspecto mucho más desgarbado, portando un acordeón. Sus chanclas, camiseta y pantalón corto, me hacían recordar al personaje de "Tom Sawyer". Pero no fue su talento musical lo que me dejó maravillada, sino su CURIOSA FORMA DE OBTENER MONEDAS de los turistas:

Tan pronto se le acercaba alguien para grabarle un vídeo, el joven músico hacía una TREMENDA MUECA, arrugando la nariz y la boca, e indicaba con su dedito índice (a modo de batuta), que le abonasen unas monedas ANTES de seguir grabando.

  • Si el turista pagaba, volvía a poner cara "de foto" y continuaba tocando;
  • Si por el contrario, el espectador "no se daba por enterado", el niño mantenía la mueca y permanecía inmóvil, generando una visión casi grotesca, como si de una gárgola humana petrificada se tratase.

¿Qué creen que hicieron los turistas? ...Efectivamente. Como habrán adivinado, depositaron unas monedas en su cajita y obtuvieron su ansiado recuerdo "mágico" de París.

Yo, por mi parte, confieso que caí rendida a los encantos del primer niño, y fue a quien le di unas monedas. Ahora bien, será el pequeño pícaro el que permanecerá en mi recuerdo por su "escuela de vida", ¡superada con sobresaliente!

(Las imágenes que he usado, son obra de la artista sueca Lena Cronqvist, una de las mayores representantes del realismo contemporáneo. El cuadro se llama "Niñas lloronas", y la escultura "Haciendo una mueca").

¡¡ Cualquiera diría que también esta artista sueca se cruzó con el "Tom Sawyer francés" y no pudo olvidar sus muecas!!...¿verdad? 

La receta de hoy es simplemente SENSACIONAL, y lo puedo decir porque no es mía. La he sacado de un libro magnífico:"Get The Glow" ("Consigue el brillo"), de Madeleine Shaw

Se trata de un mousse de chocolate hecho a base de aguacate, plátano, leche de almendras, cacao puro, miel, y poco más. No necesita cocción y basta con mezclar todos los ingredientes. Como siempre, es una receta: sin gluten, sin lácteos y muy baja en almidón

¡¡Así da gusto comer mousse de chocolate!! ¿No creen?


MOUSSE DE CHOCOLATE SALUDABLE
(6 unidades)

Ingredientes:

  • 1 aguacate maduro grande (380 g pesado con cáscara)
  • 1 plátano maduro (200 g pesado con cáscara)
  • 100 ml leche de almendras
  • Aceite de girasol (3 cucharadas soperas)
  • cacao puro en polvo marca "Valor" (4 cucharadas soperas) 
  • miel líquida (3 cucharadas soperas)

DECORACIÓN:
  • 6 frambuesas congeladas (lavarlas antes de congelarlas)

  1. Pelar el aguacate y quitarle la pipa. 
  2. Pelar el plátano.
  3. Meter todos los ingredientes (excepto las frambuesas congeladas) en un recipiente y mezclar muy bien con un robot de cocina (yo usé la Thermomix).
  4. Distribuir el mousse de chocolate en 6 copas de cristal o cuencos de postres. Desmenuzar con las manos una frambuesa congelada por encima de cada mousse de chocolate.
  5. Guardar en el congelador los 6 postres.
  6. Sacar del congelador 10-15 minutos antes de consumir. 

Próxima publicación: 15 de Octubre de 2016 (Sábado). 

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