¿Cómo están?
¿Se han fijado en que últimamente las campañas de publicidad no hacen más que ponerle tu nombre a lo que venden? Latas de cola, neveras, lavadoras...
Está comprobado que todo lo que tenga nuestro nombre (o el de nuestros hijos), resulta más familiar y por tanto más atractivo de adquirir.
Les aviso de este curioso fenómeno, no vaya a ser que la próxima vez que vayan a un concesionario de coches, éste se llame Luisa, Mari Carmen o Alfonso, y no sean capaces de resistirse a comprarlo a pesar de hacer una "avería" en el ajustado presupuesto familiar.
...otro día les contaré un par de trucos de los grandes supermercados...pero eso ya será otro día.
Hoy nos esperan unas deliciosas magdalenas de calabaza, fruto de una mañana experimental. Ah...por cierto, estas magdalenas las he llamado "MIS magdalenas de calabaza" porque no les puedo poner el nombre de todos ustedes, ¡¡je, je, je!! ¡Viva el Marketing experimental!
Estas magdalenas son: sin gluten, sin lácteos y bajas en almidón.
(Foto de las magdalenas tras aplicarles la campaña "de moda")
"MIS" MAGDALENAS DE CALABAZA (18 unidades)
Ingredientes:
- 3 huevos grandes
- 150 g azúcar
- 50 g de aceite de girasol
- 1 pellizco de sal
- 250 g de calabaza en dados
- 1/2 sobre de levadura en polvo sin gluten (Hacendado)
- 250 g nueces crudas
1. Precalentar el horno a 180 ºC (calor arriba y abajo).
2. Echar todos los ingredientes y triturarlos bien con la ayuda de un robot de cocina.
3. Con la ayuda de una cuchara sopera, distribuir la masa en moldes de papel para magdalenas (los llenaremos a la mitad de su capacidad).
4. Meter en el horno, a media altura, durante 13 minutos. Si no nos caben todas las magdalenas en una bandeja, distribuirlas en dos. Meter las DOS bandejas a la vez para evitar abrir y cerrar el horno constantemente.
La textura de estas magdalenas es similar a las “marquesinas de almendra” de Navidad. Si se comen las magdalenas calentitas, recién hechas, les prometo que llegarán a tocar el cielo de puro placer...
Próxima publicación: 10 de Enero.
Hola danzarines,
¿Se han fijado cómo la tecnología promueve la danza? ...¿No se han fijado? Sí hombre, lo que pasa es que no han estado atentos.
Sin ir más lejos, el otro día me tocó hacer unas gestiones en el banco. Pues bien: estando varias personas en la cola tras el mostrador de la ventanilla, ha sonado el típico "BIP BIP" del whatsapp.
En ese momento, se ha desencadenado una verdadera "DANZA DEL WHATSAPP": una persona tras otra, ha urgado en su bolsillo o bolso, y han desbloqueado sus móviles inteligentes a golpe de pulgar...¡prometo que parecían estar sincronizados! Algo así como cuando en un baile el grupo hace un movimiento escalonado como si de una "ola" se tratase.
Ay "almidoneros", yo no sé si es que me gusta tanto la danza que la veo por todas partes, o que "en ocasiones veo muertos" o que estoy "para que me encierren". Pero lo cierto es que: ¡qué sería de nosotros sin estos ratitos y estas reflexiones! ¿no les parece?
Hoy les traigo una receta para sorprender estas Navidades. Es una adaptación de una receta navideña sueca, conocida como "La Tentación de Jansson" cuyos ingredientes principales ERAN la patata, la nata y el pan rallado. ¡Toma tuneo!
Como siempre, es: sin gluten, sin lácteos y sin almidón.
ZANAHORIA ENCEBOLLADA CON ANCHOA (4 personas)
Ingredientes:
- 300 ml de leche de almendras (marca “La Asturiana-Alpro”)
- 500 g de zanahoria
- 3 cebolletas (500 g)
- aceite de oliva (1/2 vaso)
- 1 frasco de 100 g de anchoas (18-20 filetes )
- 50 g de almendra cruda molida (sin cáscara)
1. Sacar las anchoas de la nevera.
2. Pelar la cebolla y cortarla en láminas muy finas con la ayuda de una mandolina.
3. Echar un chorro generoso de aceite de oliva en una sartén y cuando esté caliente, dorar ligeramente la cebolla. Reservar.
4. Precalentar el horno (calor arriba y abajo) a 200 º C al menos 10 minutos.
5. Raspar las zanahorias y cortarlas en forma de bastoncitos finos (como si fueran unas patatas para freír). Reservar.
6.
Untar una fuente rectangular de horno con aceite de oliva. Echar una
capa de zanahoria (la mitad), y echar la cebolla por encima.
7.
Escurrir las anchoas y cortarlas en trozos más o menos grandes con la
ayuda de unas tijeras. Distribuirlas por encima de la cebolla. Cubrir
con la otra mitad de zanahoria.
8. Incorporar la leche de almendras, bañando las zanahorias por encima.
9. Por último, espolvorear la almendra rallada por encima.
10.
Meter en el horno a media altura durante 30 minutos. Pasado este
tiempo, sacar del horno y cubrir con papel de aluminio para que no se
seque, bajando el papel Albal por los bordes a modo de “paquetito”.
Dejar reposar 15 minutos antes de servir.