Crema de calabaza y zanahoria

...¡Bueno, bueno, bueno! Hoy les tengo que poner al día, porque por aquí siguen pasando cosas...

¿Recuerdan a Andrés, el repartidor de fruta y verdura a domicilio que me llamó "CORAZÓN" a la cara, y sin conocerme de nada? Bien. Pues han pasado tres semanas, y la historia ha tenido recorrido. Les enumero los apelativos cariñosos que ha usado desde entonces, ¡y les prometo que no me lo invento!:

• Jueves 30/01/14: CORAZONCITO
• Jueves 06/02/14: GUAPETONA
• Jueves 13/02/14: AMORCITO

...lo de poner las fechas exactas es para darle mayor aire policíaco al relato, je, je, ya saben que a mí me gusta decorar las cosas...

...Compartiré con ustedes un par de apuntes respecto al comportamiento de nuestro querido repartidor, ¡que ya saben que me gusta mucho analizar la conducta humana!

1) Andrés se lo está currando, sí, pero SE ESTÁ ARRIESGANDO MUCHO: ya me tiene acostumbrada a un piropo por visita, así que como decaiga lo más mínimo...¡¡ZAS!! ¡No tendré más remedio que suprimirle la propina! (la psicología es cruel, lo sé, pero ¡nadie dijo que fuese fácil)...

2) Con su peculiar estilo propio, se ha ganado nuestro cariño, y les puedo decir que ya forma parte de nuestra vida cotidiana. Mr. Brownie y yo nos referimos a él con el apelativo cariñoso de "CORAZÓN" (cuando toca hacer el pedido, siempre le pregunto a Mr. Brownie: "OYE MI AMOR, ¿QUÉ LE PIDO HOY A CORAZÓN? ¿NOS QUEDAN PLÁTANOS?").

3) ...Un último apunte: teniendo en cuenta que en tan sólo tres semanas, hemos pasado de CORAZONCITO a AMORCITO... no sé qué apelativos cariñosos me deparará el futuro. Así que, hagamos una cosa: si la próxima vez que les hable de "CORAZÓN", empiezo el informe poniendo dos ROMBOS, ustedes tápense al menos un ojo, ¡por lo que puedan leer!

...Ahora, CORAZONES, GUAPAS Y AMORCITOS, vamos con el plato de hoy: una deliciosa CREMA DE CALABAZA Y ZANAHORIA, que será del agrado de niños y adultos.

Como siempre, es una receta: sin gluten, sin lácteos y sin almidón.

CREMA DE CALABAZA Y ZANAHORIA (6 raciones)

85 calorías por ración

 

Ingredientes:

• 500g de calabaza
• 4 zanahorias grandes (400 g)
• 1 cebolla mediana (150 g)
• 1/2 litro de agua
• aceite de oliva (un chorro generoso)
• nuez moscada
• sal gorda
• pimienta negra molida
• pipas de calabaza y tres tallos de perejil para decorar

1. Cubrir el fondo de una olla con aceite de oliva y calentarlo.

2. Pelar y picar la cebolla en trozos pequeños. Echar en la olla y freír hasta que esté transparente.

3. Limpiar las zanahorias y cortar en láminas finas. Añadir a la sartén y freír 10 minutos junto con la cebolla.

4. Pelar la calabaza y cortarla en dados pequeños. Añadir a la olla, y rehogar 5 minutos junto con la cebolla y la zanahoria (removiendo con frecuencia).

5. Añadir el agua, la nuez moscada, la pimienta negra y la sal gorda. Cerrar la olla y cocinar a fuego fuerte hasta que suban los dos aros. Entonces, apagaremos la olla. (Si cocemos las verduras en una cazuela normal, hervir durante unos 25 minutos, o hasta que las zanahorias estén tiernas).

6. Cuando hayan bajado los aros, podremos triturar las verduras para hacer la crema.

Servir la crema con un chorrito de aceite de oliva crudo por encima en cada uno de los platos, le dará un aspecto más apetitoso.

Si se quieren poner creativos, pueden decorar la crema usando pipas de calabaza y unos rabitos de perejil...¿no me dirán que no me han quedado curiosas esas tres florecillas? ¡Eso sí, avisen a los comensales que las pipas no se comen, o se quedarán SIN DIENTES!

Bizcocho esponjoso de zanahoria

Buenos días a todos,

Hoy quiero contarles cómo viví una experiencia que siempre imaginé como muy traumática y lejana, pero que transcurrió sin pena ni gloria.

…antes que nada, les haré una sencilla pregunta: ¿cuántos de ustedes han hecho su testamento?

Lo cierto es que yo nunca me había planteado hacer mi testamento, por eso de que “no me viene bien morirme aún”, así que siempre imaginé que lo haría en mi lecho de muerte, justo antes de morir. Pero, ¿saben lo que pasa? ¡¡que no sabemos cuándo "toca"!! 

Además, el año pasado, me puse entre los propósitos del 2013, hacer mi testamento y me acordé el 30 de diciembre. Ni corta, ni perezosa, llamé a una notaría, me aseguré de que no hacía falta pedir cita, y me acerqué al día siguiente con mi DNI en mano! Las únicas indicaciones fueron: "Tráete el DNI y las ideas claritas, y lo tienes hecho en 15 minutos"...¡y así fue!

Un documento que "tanto yuyu" me daba, ¡resultó que lo resolví en 15 minutos! Tampoco me pareció caro:  40 Euros, y lo mejor: la sensación de tener un tema importante resuelto. Y es que, dejar por escrito qué pasa con tus hijas menores si quedan huérfanas, y quién te gustaría que se hiciera cargo de ellas si a ti te pasase algo es un tema demasiado importante como para dejarlo al azar...¿no creen?  

…ahora que me puedo morir tranquila, pónganse los delantales que vamos a cocinar un rico BIZCOCHO ESPONJOSO DE ZANAHORIA. 

Es una receta sin gluten, sin lácteos y baja en almidón.

 

BIZCOCHO ESPONJOSO DE ZANAHORIA (10 raciones)

392 calorías por ración

Ingredientes: 

• 230 g de almendras peladas crudas
• 170 g de nueces crudas
• 300 g de zanahorias
• 200 g de azúcar
• un trozo de piel de un limón (sólo la parte amarilla, del tamaño de un dedo índice aproximadamente)
• 4 huevos grandes (tamaño “L”)
• un pellizco de sal
• canela en polvo molida (1 cucharada de postre)
• bicarbonato de sosa (1 cucharada de postre)
• aceite de girasol para untar el molde

1. Precalentar el horno a 180ºC.

2. Triturar las almendras junto con las nueces, con la ayuda de un robot de cocina. Reservar.

3. Pulverizar el azúcar junto a la piel del limón hasta que quede un azúcar glasé de limón.

4. Lavar las zanahorias y pelarlas con la ayuda de un pelador.

5. Echar en el vaso del robot de cocina las zanahorias y triturarlas junto con el azúcar glasé de limón que acabamos de hacer.

6. Incorporar a las zanahorias trituradas: las almendras y nueces molidos, los 4 huevos, el pellizco de sal, la canela molida y el bicarbonato de sosa. Mezclar bien todos los ingredientes.

7. Untar un molde redondo de 24 centímetros de diámetro con aceite de girasol. Verter la masa en el molde. Es preferible usar un molde desmontable, pues la presentación será mucho mejor. Si no tenemos, nos valdrá la típica fuente redonda de cristal para horno.

8. Hornear durante 25 minutos a 180ºC. Pasados 15 minutos, cubriremos el bizcocho con papel Albal. Pasados los 25 minutos, apagaremos el horno y dejaremos que se enfríe del todo, dentro del horno (aún tapado con el papel de aluminio).

Podemos decorar el bizcocho con azúcar glass y haciendo una flor con la viruta de zanahoria. 




Nota acerca de la receta: uno de mis queridos almidoneros (Juanjo, ¡gracias!) ha hecho la receta sustituyendo el azúcar por miel, en la misma proporción, y ha quedado igual de rico aunque ligeramente menos dulce.

Nota a los almidoneros (que no pueden comer almidón): esta receta tiene un "BAJO contenido de almidón" (la almendra contiene 1.4g de almidón por cada 100g, en comparación con los 85.8g por cada 100g del arroz, o los 76g por cada 100g de la harina de maíz). Quienes, como yo, sean muy sensibles al almidón, no hagan esta receta más de 1 vez por semana.

A quienes no les siente bien el azúcar, la pueden sustituir por la misma cantidad de “fructosa” (no incluyo en esta recomendación a quienes sean diabéticos).

Alcachofas con berberechos y jamón

Muy buenos días,

¡Cuánta expectación despierta una persona haciendo ejercicio en la playa! ¿Se han fijado? Unos miran por curiosidad, otros por admirar el buen estado físico del atleta, a otros les da mala conciencia porque les recuerda que deberían ejercitar su propio cuerpo…

Luego es interesante distinguir entre dos categorías bien diferenciadas: los "achievers" (o "amantes de retos"), y los "exhibicionistas". Los

primeros, son deportistas: minuciosos, luchadores, sistemáticos...y ejecutan sus ejercicios de manera IDÉNTICA cada día, como si se tratase de auténticos robots del alto rendimiento. 

En la segunda categoría, encontramos al deportista exhibicionista, que tiene una tendencia natural a colocarse en el lugar más incómodo de toda la playa. Éste realiza sus ejercicios de manera poco sistemática, pues está más pendiente del público que tiene, que de los ejercicios en sí. Al atleta exhibicionista no le verás sudar la gota gorda, son más bien de poses y de mucho meditar (posando con su perfil bueno, ¡claro!).

...Yo no sé cómo lo viven ustedes, pero yo cada vez que estoy de vacaciones y disfruto de la playa, me quedo atrapada en las diferentes escenas a mi alrededor. Y ¿saben qué? Siempre llego a la misma conclusión: no soy la única a la que le fascina la conducta humana, pues como no podía ser de otra manera, ¡también yo estoy siendo observada!

...Por cierto, a ver si adivinan en cuál de las dos categorías antes mencionadas, clasificaríamos a la deportista del dibujo...je, je.

Hoy vamos a cocinar una receta muy rica en HIERRO. Como siempre, es un plato: sin gluten, sin lácteos y sin almidón.

ALCACHOFAS CON BERBERECHOS Y JAMÓN
(4 raciones)

180 calorías por ración

Ingredientes: 

• 2 latas de corazones de alcachofas (peso neto de cada lata: 390 g)
• 2 latas de berberechos (peso neto de cada lata: 111 g)
• 75 g de jamón serrano cortado en tacos
• 1 cebolla grande (250g)
• 1 tomate grande (250 g)
• aceite de oliva
• sal

 1. Pelar la cebolla y cortarla menudita. Echar un chorrito de aceite de oliva en una sartén y freír ambos ingredientes juntos, hasta que adquieran un ligero color dorado.

2. Pelar y trocear el tomate. Añadir a la sartén y freír junto a la fritura anterior.

3. Cuando el sofrito esté dorado, añadir las alcachofas y los berberechos, previamente escurridos .

4. Cocer a fuego lento 10 minutos. Servir bien caliente.

Esta receta es de mi querida “almidonera” Charo. Es un plato facilísimo de hacer y también muy original. Además, son ingredientes que podemos tener en casa para una “comida de emergencia”... Los adultos la apreciarán más que los pequeños.  

Pétalos crujientes de manzana

Uy, ¡qué poquito queda para el día de los Enamorados! ¡¡Esos días en los que nos gusta sorprender a nuestra pareja con algo diferente!! ¿Quizás con un bizcocho en forma de corazón? ¿Un globo de helio en la entrada de la puerta?...¿O simplemente un "Vale por..." inesperado?
Si aún no han decidido cómo van a sorprender a sus parejas, hoy les traigo una idea: unos PÉTALOS CRUJIENTES DE MANZANA...(¡¡cómo se nota que he trabajado en Marketing, ¿eh?...¿Han visto qué nombre más sugerente le he dado a la receta?

...Ahora les toca a ustedes: pongan boca de morritos, y CON ACENTO FRANCÉS, despierten a sus parejas el 14 de Febrero diciéndoles: Mon Amour, te he preparado unos "pétalos crujientes de manzana". ¡¡Se van a quedar MUERTOS!! Una de dos, o te preguntan si has bebido, o se arrojarán a tus brazos, ¡¡confíen en mí!!
Pero esperen, esperen, que les pongo una cancioncita que hemos entonado Ángela (9 años), Julia (7 años) y yo para que vayan entrando en ambiente romántico... ¡¡No dirán que no lo he intentado TODO!!

La receta de hoy es: sin gluten, sin lácteos y sin almidón.

PÉTALOS CRUJIENTES DE MANZANA (1 ración)

80 calorías por ración

Ingredientes:

• 2 manzanas (golden)
• Canela en polvo

1. Lavar las manzanas y pelarlas. Cortarlas en dos mitades. Quitarles el corazón. Apoyar cada mitad, sobre el lado plano, y cortar la manzana en rodajitas lo más finas posibles sin que se rompan.

2. Precalentar el horno a 100 ºC.

3. Poner papel vegetal para horno sobre una bandeja.

4. Distribuir cada una de las manzanas sobre una bandeja de horno. Espolvorear un poco de canela en polvo sobre las manzanas de una bandeja.

5. Meter las dos bandejas en el horno durante 1'5 horas. Pasado este tiempo, apagar el horno y dejar que las manzanas se enfríen dentro.

Podremos deshidratar tantas manzanas como bandejas de horno tengamos, pues cada manzana cortada en láminas ocupa una bandeja completa.

Los pétalos de manzana constituyen un tentempié  ideal para llevar dentro de nuestra mochila o bolso.

¡Que viene el COCO!

¡¡Decisión, decisión y decisión, queridos almidoneros!!

Hoy vengo para transmitirles un sólo mensaje: la indecisión no tiene cabida en la cocina...

Así de rotunda lo digo. ¡Sí señor! ...y lo sé porque HE VISTO AL COCO.

...Mr. Brownie compró un coco, allá por el mes de Noviembre, guiado por su dulce consejera "Danzarina" (¡¡papi, vamos a comprar un coco!!). Y ahí estuvo el coco, pasando las Navidades en nuestro frutero de la cocina. También disfrutó del fin de año, de la llegada de los Reyes Magos...¡incluso sufrió la cuesta de Enero!

Pero ayer, como se quedaba a cenar una amiguita de mis hijas "Trepadora" y "Danzarina", decidí que era un día IDEAL para abrir aquel coco y poder disfrutar de una exótica LECHE DE COCO. En ese momento, apareció Mr. Brownie (¡que se toma su papel de "abrecocos" muy en serio!), equipado de martillo y destornillador, como si de un verdadero Indiana Jones se tratara. Las tres niñas y yo, le animábamos mientras procedía a la apertura de aquella bola marrón y peluda que no se quedaba quieta...

...pero pronto nos dimos cuenta de que NO IBA A HABER POSTRE. Qué va. Miren en qué estado estaba el coco por dentro...ni lechita de coco, ni coco fresco a mordiscos, ¡¡sólo una especie de ceniza negra que daba al coco una apariencia de enorme cenicero!!

CADUCIDAD DEL COCO: después de esta triste experiencia (¡ya saben que yo todo me lo tomo muy a pecho, no tengo términos medios!), decidí documentarme para que no se repita la historia.

Aquí les escribo unos pocos consejos básicos:

1. Conservar el coco entero en la nevera NO MÁS DE 2 MESES.
2. ¿Cómo saber si el coco que compramos está bueno? Debe pesar mucho y al agitarlo, se escucha el movimiento de la leche de coco.
3. ¿Qué significa si no oímos líquido dentro del coco? Que está demasiado maduro y tendrá sabor a jabón...¡qué poco apetitoso, eh!

P.D. Por cierto, olvidé decirles que un coco no se abre sólo, por mucho que traten de hipnotizarle. Lo que parecen ojos, ¡no lo son!

Hoy tenía preparada la receta para el día de San Valentín, pero me entró la prisa al pensar que podrían tener cocos acumulados en sus casas, a punto de caducar...¡¡y claro, no podía esperar!! Para compensarles, les prometo que publicaré dicha receta ESTE JUEVES...¿Que cómo se llama la receta? "PÉTALOS CRUJIENTES DE MANZANA"...¡¡y para variar, no lleva ni un solo corazón!! ¡Me gusta sorprender, no ser previsible, ya lo saben!