martes, 15 de octubre de 2013

Magdalenas en veinte minutos

¡Buenos días!...Tengo algo que anunciarles: he buscado y rebuscado por las plantillas del blog, pero no he sido capaz de encontrar el botoncito del "aroma de café"... ¡¿dónde andará?! ...Pues nada: ¿saben qué les digo? Que si no hay un botoncito ¡¡pues habrá que crearlo!!

...A ver si éste les vale...yo creo que funcionará... no tienen más que pulsar, y fuissssssssss: ¡¡aroma de café al momento!! 
  ...Ah, lo olvidaba: si "por algún casual" no les funciona el botoncito, o les sale el aroma un poco claro, puede deberse a que el "hipervínculo" de dicho botón no sea compatible con sus ordenadores, móviles o tablets.
¡¡Je, Je, pero recuerden que lo que cuenta es la intención"!! ...Hecha esta aclaración, les mando otra receta: ¡Magdalenas!

La receta que les traigo hoy, la he simplificado para que la puedan hacer de manera más SENCILLA y más RÁPIDA. Son unas magdalenas muy esponjosas que se hacen muy rápido. Resultan ideales para el desayuno (miren el desayuno tan rico que me he comido yo hoy, ver foto) y la merienda.

Estas magadalenas son: sin gluten, sin lácteos y bajas en almidón. 

(Receta publicada en Octubre de 2013 y mejorada en Agosto de 2014).

  
MAGDALENAS en veinte minutos (16 unidades)

Ingredientes:

  • 250 grs de almendra pelada
  • 100 grs de miel líquida
  • 6 huevos (tamaño L, o sea "grandes")
  • bicarbonato de sosa (1/2 cuch. de postre)
  • azúcar avainillada (1 cuch. de postre) 
  • canela en polvo (1/2 cuch. de postre)
  • ralladura de limón (1 cuch. de postre)


  1. Precalentar el horno a 170ºC durante 10 minutos.
  2. Moler las almendras hasta que se conviertan en polvo. Reservar.
  3. Lavar un limón y rallar un poco de la cáscara (sólo la parte amarilla) con rallador muy fino. Reservar en un plato.
  4. Meter en un robot de cocina: los huevos, la miel líquida, la canela molida, el azúcar avainillada, el bicarbonato, las almendras molidas y la ralladura de limón. Mezclar bien hasta conseguir una masa homogénea.
  5. Disponer los moldes (de papel o de silicona) sobre una bandeja de horno y rellenar cada uno de ellos hasta la mitad de su capacidad con la masa.
  6. Meter las magdalenas en el horno durante 13 minutos (la bandeja debe colocarse justo a la mitad).
Respecto a la miel: si la que tenemos en casa ha cristalizado y se ha endurecido, bastará con meter el frasco en el microondas un ratito a potencia media. ¡No olviden quitar la tapa, que suele ser de metal!).

Nota a los almidoneros (que no pueden comer almidón): esta receta tiene un "BAJO contenido de almidón" (la almendra contiene 1.4g de almidón por cada 100g, en comparación con los 85.8g por cada 100g del arroz, o los 76g por cada 100g de la harina de maíz). Quienes, como yo, sean muy sensibles al almidón, no hagan esta receta más de 1 vez por semana.



 


2 comentarios:

  1. Hola Elena,
    llevo aproximadamente 1 mes haciendo la dieta sin, sin, sin por indicación del Dr. Isasi. Ya he hecho varias recetas tuyas ya que tengo tu libro conmigo en la cocina y me saca de más de un apuro.
    Hasta hoy no había hecho las magdalenas, aún no las he probado pero seguro que están ricas ricas, pero tengo una pregunta, ¿puedo tomar 1 o 2 diarias en el desayuno?, te lo pregunto en relación con lo que indicas en el último párrafo de hacerlas solamente 1 vez por semana por las almendras.
    Muchas gracias.

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  2. Cuánto me alegro de que mis recetas te estén viniendo tan bien. Te confieso que yo me conecto a mi blog para volver a hacer las recetas que me voy inventando, je, je, ¡tengo memoria de pez!
    Respecto a la cantidad de magdalenas que debes tomar, yo te recomiendo que comas 1 al día durante una semana. Si, como creo, te sientan divinamente, pues sube a 2 al día. Personalmente suelo comer 2 magdalenas al día durante una semana y luego "descanso" de frutos secos la siguiente semana. Pero cada persona es diferente. Yo prefiero pecar de prudente Por cierto, si te gusta un desayuno dulce, añádele a las magdalenas una cucharada de mermelada de frambuesa (marca "Helios"), ¡te chuparás los dedos! Un abrazo Laura y mil gracias por tus comentarios.

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