Algunos de ustedes me han contactado para preguntarme si estaba bien, puesto que no había publicado con la misma frecuencia que semanas anteriores.
Verán, estoy viviendo intensamente un proyecto laboral apasionante, y por ello, me paso el día metida en la cocina inventando platos nuevos. Así que, estoy muy viva, ¡gracias por preocuparse por mí!
...Y precisamente hoy no he podido dejar de volver a mi blog para darles cuenta de ese codillo que iba a preparar Mr. Brownie...
...pero vayamos al día de autos: ayer.
Yo, que estaba trabajando sobre una receta que requería cierta concentración (pues me disponía a hacer una masa quebrada para quiche, que no tuviese ni gluten, ni mantequilla), había vetado la entrada a la cocina entre las 13:45 y las 15:00 (situación a la que mis hijas están ya muy acostumbradas).
Estando yo en plena vorágine de experimentación, aparece Mr. Brownie con cara de "yo no he entrado en la cocina", y sentencia: ¡sólo meteré una cosa en el horno dos segundos, y me iré!
...Yo seguí a lo mío. Pasada una hora, empecé a notar un olor a quemado...a continuación, veo que sale humo negro del horno...
Levanté la voz de alarma: ¡¡oye, que por aquí está saliendo humo negro del horno!!
Respuesta de Mr. Brownie: ¡¡pues aún le queda otra hora!!
Por el bien de todos, convencí a Mr. Brownie de que sacara aquello de allí, y ventilamos la cocina para no morir por asfixia.
¡Pues lo meto en la olla exprés! Dijo Mr. Brownie, muy resuelto.
A la hora de comer, le dije: ¡¡espera, espera, vamos a poner el codillo "en plan mono" para la foto del blog ...fue entonces cuando intenté traspasar aquel codillo INMENSO de la fuente de horno a la fuente blanca impoluta, con tal mala suerte, que se me RESBALÓ DE LAS PINZAS...
Mr. Brownie, aun con las manoplas del horno enfundadas, hizo una magnífica parada a lo "Casillas", y lo capturó, salvándolo de caer precipitado en el suelo de la cocina ¡¡MI HÉROE!!
...pero no acabó ahí la cosa. Al ir a trinchar el codillo, nos percatamos de que aquella carne ¡no se desprendía del hueso, ni con una Black & Decker!
¡¡Pues a la olla otra vez!! sentenció Mr. Brownie, con tono de "¡¡CASTIGADO!! (eso sí, manteniendo la calma en todo momento, como aquella ocasión en la que abrió el coco caducado, armado con martillo y destornillador).
Por suerte habíamos preparado una súper ensalada como primer plato y sobrevivimos sin grandes sobresaltos.
El codillo parece ser que tras 1 hora en el horno y casi 2 en la olla exprés, estaba bueno (al día siguiente). Yo, tras ver en qué estado quedó "el campo de operaciones", no me atreví a pedirle la receta a Mr. Brownie.
Además, tras el experimento, Mr. Brownie ha llegado a la conclusión de que el codillo que tan deliciosamente preparan en su trabajo, debe de ser de un animal más pequeño, porque CADA UNO de los codillos que compró pesaba nada menos que ¡1 KILO! ¡Hacía falta un horno industrial para cocinar aquello!
...en fin, queridos almidoneros. Otro día apasionante, en nuestra cocina. Certifico que mis hijas se están curtiendo a base de bien, y están cultivando una paciencia infinita, digna del mismísimo Dalai Lama. ¿O acaso ustedes aguantarían sin entrar en la cocina ni una sola vez, teniendo que almorzar a las 15:30? ¡Yo desde luego, no!
(Mr. Brownie ha prometido volver a encargar codillo el sábado que viene. Espero poderles dar la receta muy pronto. Continuará...).
Jijijiji jajaja jajaja Jejejeje jejeje. Perdón por lo de antes; ay que bueno, genial.
ResponderEliminarLo espero con deseo.
Jijiji , es que lo estoy viendo todo, desde el principio, caras, miradas, sudores, ...... que lástima. Bueno pero bueno; que aventura.
Ánimo, va a salir exquisito seguro.
Gracias por dedicarnos parte de tu escaso tiempo. Es jijiji. Vale, cambio y cierro.
¡Qué sería de nosotros, sin esos cómicos momentos! Yo sigo diciendo que mis hijas son unas santas, porque mi madre llega a ser como yo, ¡y pido el ingreso voluntario en un internado, donde al menos, se coma a una hora decente! Je, Je.
EliminarUn fuerte abrazo, querida Charo, y gracias por tu comentario...o mejor dicho, por tus carcajadas compartidas ;)
Jijijijiji
ResponderEliminarEse codillo promete....... que pinta fantástica.
ResponderEliminarJuanjo.
Tic, tac, tic, tac...ya somos tres las personas pendientes de ese codillo...tic, tac, tic, tac...quedan sólo 5 días para que mi chico lo encargue en la carnicería...tic, tac, tic, tac... y otros 7 días para que llegue la materia prima a casa. Tic, tac, tic, tac...¡qué nerviossssssss!
Eliminar10, 9, 8, 7 ........ qué tensión, porque la pinta ....... que llegue ya, que llegue ya.
ResponderEliminarMr. Brownie hay mucho en juego eh? Que no os pueda la tensión.
"Vamos valientes que es uno y cobarde"
No me lo puedo creer, ¡hasta mi padre me habla ya de "Mr. Brownie" (sí, ahora siempre le llama así) como el "fuera de serie del codillo" e incluso me ha sugerido que ponga su propio blog, de nombre "Mr. Wonder" ("el Sr. Maravillas")...¡¡mi propio padre!! ...¿qué será lo próximo?...¡¡no lo quiero ni pensar!!
ResponderEliminarESO JAMÁS!!
ResponderEliminarA ver, sin ánimo de ofender, quien se preocupa de regalar sí, regalar todas las semanas tu preciado tiempo y romperse la cabeza, me pregunto con asombro; lo siento pero disiento, traidores .........
No pierdas tu sitio aunque un padre es un padre y un Mr. es un Mr., tú etes la, ¡tachínnn gran cocinera almidonera! Que no se olvide nadie.
Vamos hombre, hasta ahí podíamos llegar.
Al ataque Elena
:)
Besazos
Ja, Ja, nunca pensé que un codillo inacabado despertara tantas pasiones, ¡¡me parto contigo!! Un besazo
EliminarLa verdad es que me río mucho con los comentarios que haces. Ayer "toda indignada yo, jijiji" no puede evitar responder; que bueno tu padre y que tensión para el pobre Mr. Brownie, vamos que tiene que hacer un codillo perfecto porque si no ..... veo una la fila de sin sin sin rodeando tu casa con cuchillo y tenedor en mano jijiji.
ResponderEliminarBuen día y mis mejores codillos.
:))
Pobre Mr. Brownie...con lo poco que le gusta el protagonismo. Como aparezca gente con pancartas de "quereeeeemos codilllllo", voy a tener que improvisar un plan B para ahorrarle el mal trago.
ResponderEliminarEn breve, hasta los astronautas de la Estación Espacial Internacional, se pondrán a opinar sobre el codillo de Mr. Wonder...perdón, quería decir, ¡¡de Mr. BROWNIE!! Ja, Ja.